Oh my Goddess!

Mi primer encuentro conciente con el anime fue hace muchos años con Neon Genesis Evangelion. A la semana siguiente vi Akira. Con esos dos obras maestras, en mi cabeza se generó el prejuicio de que los japoneses son recontra quemados a la hora de narrar historias: especulaban los misterios de la existencia y cuestionaban acerca de la naturaleza misma del hombre.

Sin embargo, no era conciente de que ya tenía años consumiendo anime: Cobra (aquel aventureroespacial que me hacía madrugar los sábados para poder verlo en el canal 4), Lady Oscar, (quien asombraba a todos con su coraje), e incluso Candy (bueno tenía que soportar el capricho de mis primas y aguantar ese maldito estribillo de si me buscas tú a mí...)

Luego aparecieron algunos series que causaron furor: primero Super Campeones (que era transmitido por canal cuatro los sabados a las once de la mañana) y luego Caballeros del Zodiaco. Con Dragon Ball ya el anime se había establecido como uno de los géneros favoritos de mi generación. Claro está que ese furor no es exclusivo de nuestro país, sino que ocurre lo mismo en gran parte del planeta. Uno de los casos más particulares es del Naruto. El cual ha causado furor en todo el mundo, y ya tiene como más de trescientos capítulos. (Me declaro ferviente seguidor del kyubi).

Sin embargo, este post está dedicado a una serie en especial: Oh my Goddess! (Ah, Megamisama!) Básicamente se trata de un anime shoujo, es decir, un anime para mujeres: romance, amoríos, comedia, etc. En otros palabras, es del mismo género de Candy, aunque la historia de Oh my Goddess! es completamente diferente.

Oh, my Goddess! nos cuenta la historia de Morisato Keiichi, un joven universitario que gusta mucho de los autos y motos, y que pertenece al Club del Motor de su universidad. Keiichi es de buen corazón y por ello es elegido para pedir un deseo al Servicio de las Diosas. Es así que ellas envían como representante a Belldandy, Diosa de Primera Clase, Segunda Categoría Poder ilimitado.

Entonces la historia empieza a girar en torno a la relación nace a partir del deseo pedido por Keiichi: que Belldandy se quede con él por siempre. Así surgen varias situaciones, algunas graciosas, algunas tiernas y algunas tristes. En líneas generales, es una serie muy bonita, aunque algunos la podrían catalogar de muy rosada.
En el universo del Oh my Goddess! conviven diosas, demonios y humanos, aunque de una manera muy particular. En realidad esta serie tiene poco de religiosa y se centra principalmente en cómo se relacionan la pareja protagonista.

Keiichi y Belldandy van conociéndose y de manera muy inocente se enamoran. Luego la historia se va haciendo un poco más compleja a medida que aparecen nuevos personajes: Urd (la hermana mayor de Belldandy), Skuld (la hermana menor), Marller (demonio antagonista de Belldandy), y muchos más. ..

En esta imagen aparecen: Skuld, Belldandy y Urd.
Si estás interesado en ver algo de Oh my Goddess! y conocer a Belldandy, cheka el primer capitulo acá:

Si deseas ver la primera temporada completa, la puedes encontrar aquí http://www.youtube.com/user/ArcangelDArkLion